Eran las 22:34 del lunes 18 y en el cuartel de bomberos voluntarios de Centenario la guardia estaba atenta porque una dotación intervenía en un incendio en el ex matadero de Villa Obrera. Pero no sería la única en la noche porque habría otra y donde una vida estaba en riesgo.
Una camioneta Peugeot Partner llega a gran velocidad y con las balizadas encendidas por la calle Atahualpa Yupanqui desde el Barrio Vista Hermosa, de la misma desciende de la parte trasera una joven con una beba en sus brazos, una mujer y un hombre que conducía. Inmediatamente fueron recibidos por la enfermera Ximena Larriestra, la menor de tan solo un mes de vida y llamada Kenia dejo de respirar cuando su mamá le daba el pecho.
En pocos segundos y con maniobras de estimulación que le realizó finalmente reaccionó para la tranquilidad de todos, en ese momento también ya la asistía entre sus brazos el segundo jefe de bomberos, oficial Víctor Arroyo, que la tenía en brazos y en la escena se encontraban otros voluntarios entre ellos el histórico Gustavo “Taka” Mairotta y el jefe Patricio Álvarez, la joven madre estaba entre lágrimas luego de momentos desesperantes.
Los bomberos de Centenario salvaron la vida de otra beba, esos minutos desesperantes que se pueden transformar en trágicos pero que gracias a la intervención de personal constantemente capacitado permite que todo termine de la mejor manera.
