Laura Ortíz es mamá de un alumno de la Escuela Especial N°10 de Centenario y manifestó su preocupación porque su hijo con discapacidad no puede asistir a clases debido a que el transporte escolar contratado por Educación provincial no tiene una rampa de acceso ni los elementos acordes para brindarle seguridad al momento del traslado.
“No encontramos que tenían que pasar a buscar a mi hijo por el domicilio y no tenía la rampa para la silla de ruedas, estuvimos esperando cerca de una hora veinte, yo había llamado a la escuela y mandé mensajes al chofer, nos encontramos con que no tiene rampa para subir la silla y poder movilizarlo, llamé al chofer hoy para preguntarle cuanto tiempo van a tardar en solucionar y no me pudo decir, están preparando un vehículo pero esto debería haber sido desde antes, no es solo mi hijo hay otros alumnitos más” señaló en diálogo con la FM Red Social 97.9.
Laura indicó que el chofer le expresó que iba a retirar dos o tres asientos para tener espacio y que su hijo viaje: “Lo ataríamos, como si atamos todo con alambre y para salir del paso, eso muchas veces implica que estemos todo el año así, le pregunté para organizarme con el taxi, el taxi implica un gasto importante y pedirlo con antelación, son un montón de inconvenientes, dijo que esto le iba a llevar un mes y está complicada la situación económica para eso, esto lo tendrían que haber visto porque si es para una escuela especial estas cosas tienen que estar previstas, ayer mi hijo no fue a la escuela porque Mateo no podía ir a clases el ingresaba a la una y hasta las 13:40 estuvimos esperando en casa”.
En las próximas horas pedirán explicaciones a las autoridades del Distrito de Educación de Centenario y al Consejo Provincial de Educación no solo por la falta de la rampa sino por la seguridad de las unidades que brindan el servicio.
