Luego de roturas a dos colectivos de la empresa Autobuses Santa Fe y amenazas de muerte con armas a choferes de los ramales 7A y 5B comenzó un retención de tareas en la capital neuquina ya que desde la UTA decidieron reclamar en las puertas de la empresa por mayor seguridad. Gabriel Ceballos, secretario gremial, señaló que debía haber 80 unidades en la calle hasta que finalice el servicio en febrero del cual se hará cargo Expreso Tigre Iguazú y KoKo pero actualmente apenas superan los 30.
“No tenemos la cantidad de coches que se necesitan para cumplir con lo servicios que se había establecido, esta mañana salieron 34 y es una cantidad enorme que falta, la gente tiene que trabajar igual y ni hablar las condiciones, admiro a los compañeros en las condiciones que salen a trabajar” sostuvo.
También agregó que la semana pasada a un chofer del ramal 14 lo agredieron de un piedrazo en el pecho y a otro con un cuchillo. “Se le tiraban en la cinta asfáltica para que los dejen subir, no es problema de los choferes es que no hay unidades, la gente se la agarra con la cara visible que son nuestros compañeros” indicó.
Por el momento no hay servicio de transporte público funcionando en la capital neuquina y por la mañana a primera hora saldrían a trabajar si es que al menos hay 56 colectivos en condiciones señaló Ceballos.
