Un grupo de trabajadores municipales había cerrado el portón y el acceso a la oficina para reclamar, esto no cayó bien en algunos secretarios que señalaban que el suministro no se había cortado. Cerca del mediodía la protesta finalizó.
Un grupo de trabajadores municipales afiliados a ATE había comenzado el miércoles 11 por la mañana una protesta en el corralón por falta de agua en el sector de baños de mujeres, ante esta situación decidieron cerrar el portón de acceso de vehículos y las oficinas ubicadas también sobre la calle Luis Rozza.
Cerca de las 11 el secretario de Obras Públicas, Esteban Videla, y el subsecretario Gonzalo Larrazabal, llegaron al lugar y cuestionaron la medida. Videla mantuvo una discusión con Oscar Ruiz, delegado del sector quien indicó que las autoridades sabían del inconveniente y recién a media mañana se hicieron presentes.
“Te dije que llamá a los de Saneamiento, tenés agua abajo, tenés agua arriba, déjate de protestar y dejá que salgamos a trabajar, te pones a cortar al divino botón, déjate de joder, queres pasar con nosotros a ver si no tenemos agua en los tanques, tu mismo compañero subió conmigo, no querés trabajar, le estas cortando el servicio a la gente y te importa tres pitos, no digas cosas que no son todos los días que viene la gente la atiendo, cortaron ustedes mismos el agua” manifestó Videla.
“Siempre en la misma ustedes, se piensan que la gente no es animal, el más laburador vos justo Chachi, andá, no atendiste a la gente, andás escondiéndote allá en el palacio, las chicas venían con un balde a buscar agua afuera. Las compañeras desde las 8 no había agua, se le avisó a el y se va a las reuniones de gabinete y mirá a la hora que está volviendo, hace tres meses le vengo insistiendo que hay que hacer una cisterna y parece que no hay fondos, el empleado es el último que queda acá, todo lo demás si tienen solución” indicó Ruiz y agregó que nunca se realizó una reunión por los ítems y que al parecer hay directores que no conocen a los trabajadores.
Cerca del mediodía el portón fue nuevamente abierto y la atención se normalizó en las instalaciones de la calle Luis Rozza, frente al canal de riego.
