En conflictos municipales que se dieron en la actual gestión de Javier Bertoldi los camiones y máquinas del municipio eran dejados estacionados sobre la calle Islas Malvinas, frente a la Comisaría Quinta de Centenario.
Pero el lugar donde debieran ser dejados es el corralón municipal, y si bien la semana pasada hubo un reclamo de vecinos de las Manzanas 1000, no se impedía el acceso o salida de los vehículos, aunque algunos funcionarios plantearon lo contrario.
Por estos días los trabajadores municipales iniciaron un reclamo por aumento salarial, han realizado asambleas en esas instalaciones y luego marchas hacia el edificio de calle Intendente Pons, pero no hay una medida de fuerza y tampoco se ve afectada la utilización de la maquinaria.
Ya se puede considerar que se trata de un capricho de la gestión de Bertoldi que los vehículos “duerman” afuera de la comisaría, lo mismo con el número de efectivos policiales en el municipio ante cada movilización que se ha desarrollado de manera pacífica, eso sí llamativamente antes de que arriben a la zona céntrica las puertas principales del edificio son cerradas sin importar que la protesta no perjudique la atención a constribuyentes.
