Hay hondo pesar en Centenario por el fallecimiento del ex árbitro de fútbol, Gimi Portesi. Un histórico en el deporte regional que partió a los 74 años tras batallar contra una dura enfermedad.
En los últimos años se dedicó al oficio de peluquero donde nunca faltaban las charlas futboleras con los vecinos y el recuerdo de tantos partidos que había dirigido y que lo llevaron a ser uno de los más reconocidos ya que además fue director de la Escuela de Árbitros.
Nacido en Italia un 27 de marzo 1946, llegó al país en un buque junto a su familia cuando era un niño de 2 años. Padre de cuatro hijos, vivió en Estados Unidos y regresó a nuestra ciudad donde se desempeñó en el rubro comercial.
En su gran pasión que era el fútbol, en 1988 cuando se creó la LIMFIC en la ciudad estaba a cargo de la Escuela de Árbitros, en los 80 dirigió una final de la Liga Confluencia en lo que se denominaba Copa Beccar-Varela antes de una reorganización de los regionales, en total fueron 30 años en los que impartió justicia en las canchas.
El 30 de junio de 2019, ya retirado de la actividad, dirigió uno de sus últimos partidos, el de homenaje a las leyendas del fútbol centenariense, campeones del 89 y 91, que se realizó el nuevo podeliportivo “Tata” Scrivani, donde se llevó aplausos de los presentes. Una de las escenas que quedará en el recuerdo es la simulación de la utilización del VAR y el posterior cobro de un penal.
Anécdotas miles como solía contar y las cuales muchos de los vecinos que iban a cortarse el pelo relatan.
Gimi nos dejó este 2021, solo quedan palabras de agradecimiento por parte de la comunidad para alguien que aportó mucho a una profesión difícil en un deporte con mucha pasión y la cual es muy cuestionada en estos tiempos.
